Tutorías

Tutoría. Escenario para la convivencia

Sesiones para tutoría en educación secundaria

Este trabajo ofrece recursos y presenta los beneficios de las técnicas dramáticas para trabajar en tutoría los problemas de convivencia en centros educativos, dando espacio a la gestión de las emociones, sentimientos y valores como algo fundamental en el desarrollo integral de la persona.

Autores: Vicente Cutillas Sánchez, Josefa Morató Ascó y Magdalena Rizo Soler 

Editorial: Ediciones Aljibe

Medidas: 17 x 24 cms

No páginas: 289 

Encuadernación: rústica con solapas

PVP: 14,80 € con IVA

ISBN: 978-84-9700-617-0

1. Introducción

El trabajo que a continuación presentamos viene motivado por el aprovechamiento de las técnicas dramáticas para trabajar en tutoría los problemas de convivencia en los centros educativos. Nuestra propuesta tiene su génesis en la optativa de Dramatización y teatro (en adelante DT); en varias obras escritas con y para los alumnos/as de ESO y cuyos núcleos temáticos están relacionados con la convivencias, los problemas de los adolescente, los valores universales, los transversales, etc; temas surgidos en las sesiones de la optativa elegidos y debatidos con y por los discentes. Las obras a las que nos referimos son la concentración de todos esos núcleos y es, a partir de ellos, desde donde nos ha surgido la idea de conectar contenidos del Plan de Acción Tutorial (en adelante PAT) con los contenidos de la dramatización en beneficios de la convivencia.

La Experiencia nos enseña que la concepción de la enseñanza ha cambiado mucho en los últimos años, por ello quizás deberíamos hablar de educación, que es un concepto más amplio, completo y holísticos. Al hilo de este planteamiento, los docentes nos encontramos con que las tutorías lectivas son complicadas e incluso ineficaces si el tutor no maneja recursos adecuados para este alumnado y para los objetivos y contenidos del PAT. Lo que nos ha impulsado a dar a conocer nuestro trabajo ha sido y es ver a multitud de compañeros desanimados y pesarosos, derrotados/as ante la imposibilidad de motivar a sus discentes en las horas preceptivas de tutoría.

El profesor se queja de la falta de preparación psicopedagógica para esta labor. El Departamento de Orientación ofrece mucho material para trabajar en tutoría; e Internet está repleto de propuestas que se quedan en eso, porque a este material escrito o audiovisual hay que darle vida, actividad y movimiento. Es preciso hacerlo atractivo para un alumnado acostumbrado a la inmediatez, a las 25 imágenes por segundo de un anuncio publicitario, de la PlayStation o de los clips de videos que nos llegan directamente a través de mail, por ejemplo. La rapidez, la condensación, el impacto visual es lo que resulta atractivo a nuestros jóvenes.

El tutor debe tener muy planificada y estudiadas sus intervenciones, pues si improvisa demasiado el alumnado se da cuenta y acaba desconectando, y si es muy estricto o intelectualista, el alumno no ve la diferencia con una clase normal y se inhibe o reacciona de manera poco participativa, cuando no agresiva. No podemos olvidar que la tutoría supone una gran dosis de emotividad, cercanía, participación y libertad. Los estudios exigen al autor que responda a estas necesidades. Muchos profesores temen que este acercamiento les lleve a hacer el ridículo o a que la clase "se les escape de las manos".

El teatro y las técnicas dramáticas son un recurso excepcional para las funciones tutoriales porque favorecen la síntesis entre lo emotivo y lo intelectual, ayudan a mejorar la convivencia, ya que requieren un trabajo cooperativo que desinhiben al alumnado y repercute en la mejor relación entre profesor y alumno/a.

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